romo

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¿Que son los dos periodos de romanticismo?

1830-1860=Naturalismo, Realismo, Costumbres 1860-1890= Darwin Evolucion

cuando era el tiempo de afranscesamiento?

1910 despues de la revolucion mexicana

fecha de revolucion mexicana

20 nov. 1910-el tiempo de afranscesamiento (Que admira excesivamente o imita a los franceses)

Búcate plata, búcate plata, porque no doy un paso má etoy a arró con galleta na má Yo bien sé cómo etá to pero viejo, hay que comer: búcate plata, búcate plata

Bucate Plata Nicolas Guillen

Doctrina Monroe

Dec 2 1823

¿De que trata romanticismo?

El uso de naturaleza para reflejar los sentimientos del artista, se idealiza el pasado pre-hispanico, la libertad, yo como el centro del mundo

mas de modernismo

En Modernismo, el idea independencia era una characteristica además de simbolismo (por el color y música), parnuislanismo, romanticismo, arte por arte---> la belleza de la clase alta, el extranjero, y exótico (lo exótico es lo desconocido=asia) TODO ESO SIGUE LOS PENSAMIENTOS DE FRANCIA.

de que trata Mi Caballero

el gozo del hijo cuando juegan en las mananas

de que trata los heraldos negros?

el sufrimiento universal en el mundo nos obliga a perder nuestra fe, debido a los dolores de la vida

tema/ tesis de tu me quieres blanca

elas expectativas de castidad y pureza en la mujer impuesta por el hombre, el papel de la mujer en la sociedad, los derechos de la mujer, el hombre como el enemigo, el hombre busca a una mujer virgen

https://lyricstranslate.com/en/sonatina-sonatina.html La princesa está triste... ¿Qué tendrá la princesa? Los suspiros se escapan de su boca de fresa, que ha perdido la risa, que ha perdido el color. La princesa está pálida en su silla de oro, está mudo el teclado de su clave sonoro y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor. El jardín puebla el triunfo de los pavos reales. Parlanchina, la dueña, dice cosas banales, y vestido de rojo piruetea el bufón. La princesa no ríe, la princesa no siente; la princesa persigue por el cielo de Oriente la libélula vaga de una vaga ilusión. ¿Piensa acaso en el príncipe de Golconda o de China, o en el que ha detenido su carroza argentina para ver de sus ojos la dulzura de luz, o en el rey de las Islas de las Rosas fragantes, o en el que es soberano de los claros diamantes, o en el dueño orgulloso de las perlas de Ormuz? ¡Ay!, la pobre princesa de la boca de rosa quiere ser golondrina, quiere ser mariposa, tener alas ligeras, bajo el cielo volar; ir al sol por la escala luminosa de un rayo, saludar a los lirios con los versos de Mayo , o perderse en el viento sobre el trueno del mar. Ya no quiere el palacio, ni la rueca de plata, ni el halcón encantado, ni el bufón escarlata, ni los cisnes unánimes en el lago de azur. Y están tristes las flores por la flor de la corte, los jazmines de Oriente, los nelumbios del Norte, de Occidente las dalias y las rosas del Sur. ¡Pobrecita princesa de los ojos azules! Está presa en sus oros, está presa en sus tules, en la jaula de mármol del palacio real; el palacio soberbio que vigilan los guardas, que custodian cien negros con sus cien alabardas, un lebrel que no duerme y un dragón colosal. ¡Oh, quién fuera hipsipila que dejó la crisálida! (La princesa está triste. La princesa está pálida.) ¡Oh visión adorada de oro, rosa y marfil! ¡Quién volara a la tierra donde un príncipe existe (La princesa está pálida. La princesa está triste.) más brillante que el alba, más hermoso que Abril! «Calla, calla, princesa -dice el hada madrina-; en caballo con alas, hacia acá se encamina, en el cinto la espada y en la mano el azor, el feliz caballero que te adora sin verte, y que llega de lejos, vencedor de la Muerte, a encenderte los labios con un beso de amor.»

sonantina ruben dario

cuales eventos historicos pasaron durante vanguardia?

1 y 2 guerra mundial, freud, marx, lumiere

jose marti dos patrias

Dos patrias tengo yo: Cuba y la noche. ¿O son una las dos? No bien retira su majestad el sol, con largos velos y un clavel en la mano, silenciosa Cuba cual viuda triste me aparece. ¡Yo sé cuál es ese clavel sangriento que en la mano le tiembla! Está vacío mi pecho, destrozado está y vacío en donde estaba el corazón. Ya es hora de empezar a morir. La noche es buena para decir adiós. La luz estorba y la palabra humana. El universo habla mejor que el hombre. Cual bandera que invita a batallar, la llama roja de la vela flamea. Las ventanas abro, ya estrecho en mí. Muda, rompiendo las hojas del clavel, como una nube que enturbia el cielo, Cuba, viuda, pasa...

¿Y fue por este río de sueñera y de barro que las proas vinieron a fundarme la patria? Irían a los tumbos los barquitos pintados entre los camalotes de la corriente zaina. Pensando bien la cosa, supondremos que el río era azulejo entonces como oriundo del cielo con su estrellita roja para marcar el sitio en que ayunó Juan Díaz y los indios comieron. Lo cierto es que mil hombres y otros mil arribaron por un mar que tenía cinco lunas de anchura y aún estaba poblado de sirenas y endriagos y de piedras imanes que enloquecen la brújula. Prendieron unos ranchos trémulos en la costa, durmieron extrañados. Dicen que en el Riachuelo, pero son embelecos fraguados en la Boca. Fue una manzana entera y en mi barrio: en Palermo. Una manzana entera pero en mitá del campo expuesta a las auroras y lluvias y suestadas. La manzana pareja que persiste en mi barrio: Guatemala, Serrano, Paraguay y Gurruchaga. Un almacén rosado como revés de naipe brilló y en la trastienda conversaron un truco; el almacén rosado floreció en un compadre, ya patrón de la esquina, ya resentido y duro. El primer organito salvaba el horizonte con su achacoso porte, su habanera y su gringo. El corralón seguro ya opinaba YRIGOYEN, algún piano mandaba tangos de Saborido. Una cigarrería sahumó como una rosa el desierto. La tarde se había ahondado en ayeres, los hombres compartieron un pasado ilusorio. Sólo faltó una cosa: la vereda de enfrente. A mí se me hace cuento que empezó Buenos Aires: La juzgo tan eterna como el agua y como el aire.

Jorge Luis Borges Fundacion mitica de Buenos Aires

En la humedad gris y blanca de la mañana, las lavanderas tallan su ropa1. Entre sus manos el mantel se hincha como a medio cocer, y de pronto revienta con mil burbujas de agua. Arriba sólo se oye el chapoteo2 del aire sobre las sábanas mojadas. Y a pesar de los pequeños toldos de lámina, siento como un gran ruido de manantial. El motor de los coches que pasan por la calle llega atenuado3; jamás sube completamente. La ciudad ha quedado atrás; retrocede, se pierde en lavanderasel fondo de la memoria. Las manos se inflaman, van y vienen, calladas; los dedos chatos, las uñas en la piedra, duras como huesos, eternas como conchas de mar. Enrojecidas de agua, las manos se inclinan como si fueran a dormirse, a caer sobre la funda de la almohada. Pero no. La terca mirada de doña Otilia las reclama. Las recoge. Allí está el jabón, el pan de a cincuenta centavos y la jícara4 morena que hace saltar el agua. Las lavanderas tienen el vientre humedecido de tanto recargarlo en la piedra porosa y la cintura incrustada de gotas que un buen día estallarán. A doña Otilia le cuelgan cabellos grises de la nuca; Conchita es la más joven, la piel restirada5 a reventar sobre mejillas redondas (su rostro es un jardín y hay tantas líneas secretas en su mano); y doña Matilde, la rezongona,6 a quien siempre se le amontona la ropa. - Del hambre que tenían en el pueblo el año pasado, no dejaron nada para semilla. - Entonces, ¿este año no se van a ir a la siembra, Matildita? -Pues no, pues ¿qué sembramos? ¡No le estoy diciendo que somos un pueblo de muertos de hambre! - ¡Válgame Dios! Pues en mi tierra, limpian y labran la tierra como si tuviéramos maíz. ¡A ver qué cae! Luego dicen que lo trae el aire. - ¿E1 aire? ¡Jesús mil veces! Si el aire no trae más que calamidades. ¿Lo que trae es puro chayotillo! 7 Otilia, Conchita y Matilde se le quedan viendo a doña Lupe que acaba de dejar su bulto en el borde del lavadero. - Doña Lupe, ¿por qué no había venido? - De veras doña Lupe, hace muchos días que no la veíamos por aquí. - Ya la andábamos extrañando. Las cuatro hablan quedito.8 El agua las acompaña, las cuatro encorvadas9 sobre su ropa, los codos paralelos, los brazos hermanados. - Pues ¿qué le ha pasado Lupita que nos tenía tan abandonadas? Doña Lupe, con su voz de siempre, mientras las jícaras jalan el agua para volverla a echar sobre la piedra, con un ruido seco, cuenta que su papá se murió (bueno, ya estaba grande)10 pero con todo y sus años era campanero, por allá por Tequisquiapan11 y lo querían mucho el señor cura y los fieles. En la procesión, él era quien le seguía al señor cura, el que se quedaba en el segundo escalón durante la santa misa, bueno, le tenían mucho respeto. Subió a dar las seis como siempre, y así, sin aviso, sin darse cuenta siquiera, la campana lo tumbó de la torre. Y repite doña Lupe más bajo aún, las manos llenas de espuma blanca: -Sí. La campana lo mató. Era una esquila,12 de esas que dan vuelta. Se quedan las tres mujeres sin movimiento bajo la huida del cielo. Doña Lupe mira un punto fijo: - Entonces, todos los del pueblo agarraron la campana y la metieron a la cárcel. - ¡Jesús mil veces! - Yo le voy a rezar hasta muy noche a su papacito... Arriba el aire chapotea sobre las sábanas.

Las Lavenderas Elena Poniatowska

jose marti mi caballero

Por las mañanas Mi pequeñuelo Me despertaba Con un gran beso. Puesto a horcajadas Sobre mi pecho, Bridas forjaba Con mis cabellos. Ebrio él de gozo, De gozo yo ebrio, Me espoleaba Mi caballero: ¡Qué suave espuela Sus dos pies frescos! ¡Cómo reía Mi jinetuelo! Y yo besaba Sus pies pequeños, Dos pies que caben En solo un beso!

resumen de dos patrias

Resumen Este poema es sobre la guerra entre Cuba y España. El autor dice que tiene dos patrias - Cuba y la noche. Cuando pone el sol, Cuba aparece en la forma de una viuda con un clavel sangriento en su mano. El espacio donde el corazón del autor era es vacío. El autor dice que es noche ahora y es la hora de morir. Hay una bandera que invita el autor a pelear como una vela flamea. Mira ventanas abiertas. En el fin del poema, Cuba, callada, pasa rompiendo las hojas del clavel.

que rechazó silva?

Silva rechaza el modernismo preciosista de primera hora, el de las fiestas galantes y objetos decorativos, se burla de los imitadores de Ruben Dario en poesía

Éste que ves, engaño colorido, que, del arte ostentando los primores, con falsos silogismos de colores es cauteloso engaño del sentido; éste, en quien la lisonja ha pretendido excusar de los años los horrores, y venciendo del tiempo los rigores triunfar de la vejez y del olvido, es un vano artificio del cuidado, es una flor al viento delicada, es un resguardo inútil para el hado: es una necia diligencia errada, es un afán caduco y, bien mirado, es cadáver, es polvo, es sombra, es nada.

Sor Juana Barroco

de que trata sonatina?

The princess finds herself a prisoner of material values ​​- the palace, wealth - but she can free herself, find harmony and beauty in another remote place, which she reaches through her imagination. This theme is linked to the vital attitude of modernist poets who, faced with a positivist, industrialized world, adopt an evasive poetic stance and enclose themselves in an ivory tower.

Yo no sufro este dolor como César Vallejo. Yo no me duelo ahora como artista, como hombre ni como simple ser vivo siquiera. Yo no sufro este dolor como católico, como mahometano ni como ateo. Hoy sufro solamente. Si no me llamase César Vallejo, también sufriría este mismo dolor. Si no fuese artista, también lo sufriría. Si no fuese hombre ni ser vivo siquiera, también lo sufriría. Si no fuese católico, ateo ni mahometano, también lo sufriría. Hoy sufro desde más abajo. Hoy sufro solamente. Me duelo ahora sin explicaciones. Mi dolor es tan hondo, que no tuvo ya causa ni carece de causa. ¿Qué sería su causa? ¿Dónde está aquello tan importante, que dejase de ser su causa? Nada es su causa; nada ha podido dejar de ser su causa. ¿A qué ha nacido este dolor, por sí mismo? Mi dolor es del viento del norte y del viento del sur, como esos huevos neutros que algunas aves raras ponen del viento. Si hubiera muerto mi novia, mi dolor sería igual. Si la vida fuese, en fin, de otro modo, mi dolor sería igual. Hoy sufro desde más arriba. Hoy sufro solamente. Miro el dolor del hambriento y veo que su hambre anda tan lejos de mi sufrimiento, que de quedarme ayuno hasta morir, saldría siempre de mi tumba una brizna de yerba al menos. Lo mismo el enamorado. ¡Qué sangre la suya más engendrada, para la mía sin fuente ni consumo! Yo creía hasta ahora que todas las cosas del universo eran, inevitablemente, padres o hijos. Pero he aquí que mi dolor de hoy no es padre ni es hijo. Le falta espalda para anochecer, tanto como le sobra pecho para amanecer y si lo pusiesen en la estancia oscura, no daría luz y si lo pusiesen en una estancia luminosa, no echaría sombra. Hoy sufro suceda lo que suceda. Hoy sufro solamente.

Voy a hablar de la esperanza cesar vallejo

¡Es con voz de la Biblia, o verso de Walt Whitman, que habría que llegar hasta ti, Cazador! Primitivo y moderno, sencillo y complicado, con un algo de Washington y cuatro de Nemrod. Eres los Estados Unidos, eres el futuro invasor de la América ingenua que tiene sangre indígena, que aún reza a Jesucristo y aún habla en español. Eres soberbio y fuerte ejemplar de tu raza; eres culto, eres hábil; te opones a Tolstoy. Y domando caballos, o asesinando tigres, eres un Alejandro-Nabucodonosor. (Eres un profesor de energía, como dicen los locos de hoy.) Crees que la vida es incendio, que el progreso es erupción; en donde pones la bala el porvenir pones. No. Los Estados Unidos son potentes y grandes. Cuando ellos se estremecen hay un hondo temblor que pasa por las vértebras enormes de los Andes. Si clamáis, se oye como el rugir del león. Ya Hugo a Grant le dijo: «Las estrellas son vuestras». (Apenas brilla, alzándose, el argentino sol y la estrella chilena se levanta...) Sois ricos. Juntáis al culto de Hércules el culto de Mammón; y alumbrando el camino de la fácil conquista, la Libertad levanta su antorcha en Nueva York. Mas la América nuestra, que tenía poetas desde los viejos tiempos de Netzahualcoyotl, que ha guardado las huellas de los pies del gran Baco, que el alfabeto pánico en un tiempo aprendió; que consultó los astros, que conoció la Atlántida, cuyo nombre nos llega resonando en Platón, que desde los remotos momentos de su vida vive de luz, de fuego, de perfume, de amor, la América del gran Moctezuma, del Inca, la América fragante de Cristóbal Colón, la América católica, la América española, la América en que dijo el noble Guatemoc: «Yo no estoy en un lecho de rosas»; esa América que tiembla de huracanes y que vive de Amor, hombres de ojos sajones y alma bárbara, vive. Y sueña. Y ama, y vibra; y es la hija del Sol. Tened cuidado. ¡Vive la América española! Hay mil cachorros sueltos del León Español. Se necesitaría, Roosevelt, ser Dios mismo, el Riflero terrible y el fuerte Cazador, para poder tenernos en vuestras férreas garras. Y, pues contáis con todo, falta una cosa: ¡Dios!

a roosevelt uben dario

Tú Me Quieres Blanca Tú me quieres alba, Me quieres de espumas, Me quieres de nácar. Que sea azucena Sobre todas, casta. De perfume tenue. Corola cerrada Ni un rayo de luna Filtrado me haya. Ni una margarita Se diga mi hermana. Tú me quieres nívea, Tú me quieres blanca, Tú me quieres alba. Tú que hubiste todas Las copas a mano, De frutos y mieles Los labios morados. Tú que en el banquete Cubierto de pámpanos Dejaste las carnes Festejando a Baco. Tú que en los jardines Negros del Engaño Vestido de rojo Corriste al Estrago. Tú que el esqueleto Conservas intacto No sé todavía Por cuáles milagros, Me pretendes blanca (Dios te lo perdone), Me pretendes casta (Dios te lo perdone), ¡Me pretendes alba! Huye hacia los bosques, Vete a la montaña; Límpiate la boca; Vive en las cabañas; Toca con las manos La tierra mojada; Alimenta el cuerpo Con raíz amarga; Bebe de las rocas; Duerme sobre escarcha; Renueva tejidos Con salitre y agua; Habla con los pájaros Y lévate al alba. Y cuando las carnes Te sean tornadas, Y cuando hayas puesto En ellas el alma Que por las alcobas Se quedó enredada, Entonces, buen hombre, Preténdeme blanca, Preténdeme nívea, Preténdeme casta.

alfonsina storni tu me quieres blanca vanguardias

cual tipo de final el hijo tiene? por que

cerrdao porque quiroga nos dice que pasa

de que trata a roosevelt?

compara ee.uu a america y dice que ee.uu falta dios y ee.uu es un invasor, soberbio, mejor representante de tu raza comparado a habla epsnaol, reza a dios, y ser idigena

Casas enfiladas, casas enfiladas, casas enfiladas. Cuadrados, cuadrados, cuadrados. Casas enfiladas. Las gentes ya tienen el alma cuadrada, ideas enfila y ángulo en la espalda. Yo misma he vertido ayer una lágrima, Dios mio, cuadrada.

cuadrados y angulos

que es el tema de los sonetos de la muerte por gabriela mistral?

el amor a traves de la muerte es muy fuerte como el amor por la madre y el alcanze del amor materno

modernismo XX primera trabajo

fecha: 1888 rubén darío "Azul"

el hijo

horacio quiroga vanguardias obra psychologica SURREALISMO

en vanguardias, se puede ver que la sociedad esta tratando de ser ___

innovador

Una noche una noche toda llena de perfumes, de murmullos y de música de älas, Una noche en que ardían en la sombra nupcial y húmeda, las luciérnagas fantásticas, a mi lado, lentamente, contra mí ceñida, toda, muda y pálida como si un presentimiento de amarguras infinitas, hasta el fondo más secreto de tus fibras te agitara, por la senda que atraviesa la llanura florecida caminabas, y la luna llena por los cielos azulosos, infinitos y profundos esparcía su luz blanca, y tu sombra fina y lángida y mi sombra por los rayos de la luna proyectada sobre las arenas tristes de la senda se juntaban. Y eran una y eran una ¡y eran una sola sombra larga! ¡y eran una sola sombra larga! ¡y eran una sola sombra larga! Esta noche solo, el alma llena de las infinitas amarguras y agonías de tu muerte, separado de ti misma, por la sombra, por el tiempo y la distancia, por el infinito negro, donde nuestra voz no alcanza, solo y mudo por la senda caminaba, y se oían los ladridos de los perros a la luna, a la luna pálida y el chillido de las ranas, sentí frío, era el frío que tenían en la alcoba tus mejillas y tus sienes y tus manos adoradas, ¡entre las blancuras níveas de las mortüorias sábanas! Era el frío del sepulcro, era el frío de la muerte, Era el frío de la nada... Y mi sombra por los rayos de la luna proyectada, iba sola, iba sola ¡iba sola por la estepa solitaria! Y tu sombra esbelta y ágil fina y lánguida, como en esa noche tibia de la muerta primavera, como en esa noche llena de perfumes, de murmullos y de músicas de alas, se acercó y marchó con ella, se acercó y marchó con ella, se acercó y marchó con ella... ¡Oh las sombras enlazadas! ¡Oh las sombras que se buscan y se juntan en las noches de negruras y de lágrimas!...

jose asuncion silva

nocturno III

jose asuncion silva

En dulce charla de sobremesa, mientras devoro fresa tras fresa, y abajo ronca tu perro Bob, te haré el retrato de la duquesa que adora a veces al duque Job. No es la condesa de Villasana caricatura, ni la poblana de enagua roja, que Prieto amó; no es la criadita de pies nudosos, ni la que sueña con los gomosos y con los gallos de Micoló. Mi duquesita, la que me adora, no tiene humos de gran señora: es la griseta de Paul de Kock. No baila Boston, y desconoce de las carreras el alto goce y los placeres del five o'clock. Pero ni el sueño de algún poeta, ni los querubes que vio Jacob, fueron tan bellos cual la coqueta de ojitos verdes, rubia griseta, que adora a veces el duque Job. Si pisa alfombras, no es en su casa; si por Plateros alegre pasa y la saluda madam Marnat, no es, sin disputa, porque la vista, sí porque a casa de otra modista desde temprano rápida va. No tiene alhajas mi duquesita, pero es tan guapa, y es tan bonita, y tiene un perro tan v'lan, tan pschutt; de tal manera trasciende a Francia, que no la igualan en elegancia ni las clientes de Hélene Kossut. Desde las puertas de la Sorpresa hasta la esquina del Jockey Club, no hay española, yanqui o francesa, ni más bonita ni más traviesa que la duquesa del duque Job. ¡Cómo resuena su taconeo en las baldosas! ¡Con qué meneo luce su talle de tentación! ¡Con qué airecito de aristocracia mira a los hombres, y con qué gracia frunce los labios ¡Mimí Pinsón! Si alguien la alcanza, si la requiebra, ella, ligera como una cebra, sigue camino del almacén; pero, ¡ay del tuno si alarga el brazo! ¡Nadie se salva del sombrillazo que le descarga sobre la sien! ¡No hay en el mundo mujer más linda! Pie de andaluza, boca de guinda, sprint rociado de Veuve Clicquot, talle de avispa, cutis de ala, ojos traviesos de colegiala como los ojos de Louise Theo. Ágil, nerviosa, blanca, delgada, media de seda bien restirada, gola de encaje, corsé de crac, nariz pequeña, garbosa, cuca, y palpitantes sobre la nuca rizos tan rubios como el coñac. Sus ojos verdes bailan el tango; nada hay más bello que el arremango provocativo de su nariz. Por ser tan joven y tan bonita, cual mi sedosa, blanca gatita, diera sus pajes la emperatriz. ¡Ah! Tú no has visto cuando se peina, sobre sus hombros de rosa reina caer los rizos en profusión. Tú no has oído que alegre canta, mientras sus brazos y su garganta de fresca espuma cubre el jabón. Y los domingos, ¡con qué alegría!, oye en su lecho bullir el día ¡y hasta las nueve quieta se está! ¡Cuál se acurruca la perezosa bajo la colcha color de rosa, mientras a misa la criada va! La breve cofia de blanco encaje cubre sus rizos, el limpio traje aguarda encima del canapé. Altas, lustrosas y pequeñitas, sus puntas muestran las dos botitas, abandonadas del catre al pie, Después, ligera, del lecho brinca, ¡oh quién la viera cuando se hinca blanca y esbelta sobre el colchón! ¿Qué valen junto de tanta gracia las niñas ricas, la aristocracia, ni mis amigas del cotillón? Toco; se viste; me abre; almorzamos; con apetito los dos tomamos un par de huevos y un buen beefsteak, media botella de rico vino, y en coche, juntos, vamos camino del pintoresco Chapultepec. Desde las puertas de la Sorpresa hasta la esquina del Jockey Club, no hay española, yanqui o francesa, ni más bonita ni más traviesa que la duquesa del duque Job.

la duquesa job The Duchess Job is the first poem addressed to the middle class of the Porfirian Society, this represented a very important change for the time since before modernism literature focused on other social classes. It must be remembered that in the first decade of the Century XX Mexican high society was ruled by Positivist thought that is why they admired everything that came from France, belittling everything that was not like that. Gutiérrez Najera composes this poem as suggesting that also in Mexico you have a lady (duchess) who was not exactly from France, making reference to places in Mexico City that were the most crowded, elegant and above all representative of the time such as Plateros and San Francisco streets, the Jockey Club, La Sorpresa, a factory at that time. I think the poem is interesting because it makes a brief but very interesting and detailed journey through the Mexico of the Porfiriato, it is funny to a certain extent because it mentions the refined customs used by the bourgeois of that time; as are all the words associated with the French culture that used as, properly descriptive terms in this case, a clear example of this we find in this stanza: There is no jewelry for my little duke, but she's so pretty and so pretty, and has a body so 'v' lan ', so' pschutt ', in such a way it transcends France, that do not equal him in elegance nor the clients of Hélene Kossut.

de que trata cuadrados y angulos?

la importancia de no atenerse (conform) y la rebelion contra el materialismo

de que trata los esctiros por gutierrez najera?

los ecritos de najera revelan una busqueda constante de la belleza, la elegancia y la perfeccion por parte del poeta, cuentista y cronista mexicano

Hay golpes en la vida, tan fuertes... Yo no sé! Golpes como del odio de Dios; como si ante ellos, la resaca de todo lo sufrido se empozara en el alma... Yo no sé! Son pocos; pero son... Abren zanjas oscuras en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte. Serán tal vez los potros de bárbaros atilas; o los heraldos negros que nos manda la Muerte. Son las caídas hondas de los cristos del alma, de alguna fe adorable que el Destino blasfema. Esos golpes sangrientos son las crepitaciones de algún pan que en la puerta del horno se nos quema Y el hombre... Pobre... pobre! Vuelve los ojos, como cuando por sobre el hombro nos llama una palmada; vuelve los ojos locos, y todo lo vivido se empoza, como charco de culpa, en la mirada. Hay golpes en la vida, tan fuertes... Yo no sé!

los heraldos negros cesar vallejo

de que trata nocturno III?

los sentimientos ante la muerte de su hermana

¿Cual es el estilo de Jose Marti?

lucha por la libertad politica e intelectual ROMANTICISMO Y POST-MODERNISMO

cual periodo es la duquesa job por gutierrez najera?

modernismo

tesis de voy a hablar de la esperanza?

no importa quien es, o como se identifica, porque siempre va a sufrir durante la vida, con o sin razon

recursos literarios dentro nocturno III

náfora: l. 1-3 "una noche", l. 21-23 "y eran una sola sombra larga", l. 51-53 "se acercó y marchó con ella" Cromatismo: l.6 "pálida" l.12 "cielos azulosos" Sinestesia: l. 32 "se oían los ladridos de los perros", l. 36 "sentí frío"


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